miércoles, 22 de mayo de 2019

Cuerdas y cuerda


Cuerda, estoy según el ser humano
Cuerdas, me atan de pies y manos
Locura, esa frase se escapó de mis labios
Loca, me llamaron los hombres viejos y sabios.

Estás mal, juraron entre risas
Estás mal, gritaron tras las rejas
No llores, me dijo con su sonrisa
Llora, me susurró en la oreja.

Abre los ojos, no seas ingenua
Abre los ojos, nada de eso es real
Hoy no hay escuela, estás enferma
Estás enferma, no volverás a estudiar

Estás pálida, niña mía,  ¿Vas a almorzar?
Estás pálida. Te quedas sin cenar
Debiste tomarte las pastillas
Has hecho bien en arrojar las pastillas al mar



lunes, 20 de mayo de 2019

Si me quieres...

Sus palabras suenan como susurros en mis oídos, y sus besos se extienden hacia mis labios. Dulce amor, dulce destino. Ojalá no fueras solo un sueño perdido. Si me quieres, dímelo. Si no me quieres, no me lo digas.
Mi corazón no lo aguantaría.

Me quiere, no me quiere. Mi maldición son cuatro palabras, que se fusionan en una sola desgracia; él nunca me amará.

Es curiosa, la manera en la que amamos a la gente, aferrándonos a sus brazos sin poderlos tocar. Anhelando sus labios sin poderlos besar. Perdernos en su mirada sin poderles mirar. ¿Se trata de curiosidad o tan solo de malestar? Mi obsesión podría ser mi final.

Enamorada. Enferma. Perdida. Olvidada.

Mis versos se escapan de mi boca apenada.

Si me quieres, aferrate a mí como una ola, que regresa siempre al mar.
Si no me quieres, si no puedes verme, entonces me olvidaré de amar.
Pero no quiero olvidar tus ojos, ni tampoco de la felicidad.


Si me quieres, déjate llevar.
Y si no, permíteme olvidar.

Pero mi dulce corazón jamás lo aguantará.


Nevermind

jueves, 16 de mayo de 2019

Días solitarios

Puede que el cielo esté alejado de la tierra por algún motivo en específico. ¿Alguna vez te lo has preguntado? Somos humanos pero en el todo no somos más que otros animales. Tal vez la única diferencia entre ellos y nosotros sea que ellos no han aprendido aún a destruir el planeta que les cobija. Y nosotros, si.

Ha habido pocas veces en las que me he planteado en que consiste realmente soñar. Procuro permanecer en la ignorancia, porque la ciencia suele matar la magia. Incendia la esperanza con rapidez, y, al mismo tiempo, la crea. Crea y destruye con una facilidad sorprendente, si puedo ser sincera. Pero no nos interesa a todos. Muchos preferimos desaparecer de entre este mundo de vivos y muertos y escondernos tras palabras abrumadoras. Tras secretos olvidados.

Es probable que hayas llegado a este blog por casualidad, que leas mis palabras intentando averiguar mi identidad, o verte reflejado en ellas. Podría ser tu hermana, tu vecina, tu profesora, tu novia, la chica callada de clase.

Puedo ser cualquier persona. ¿No es divertido? Supongo que la gracia de internet es el anonimato. Puedes ser quien quieras. Aunque, a su vez, el incógnito saca lo peor del ser humano. Al creer que no nos descubrirán, que nos juzgarán, nos volvemos asesinos, pederastas, acosadores, manipuladores. Todo el mundo es malo. Nadie es bueno. Yo no soy buena, y tú tampoco, no te auto engañes. Todos somos igual de estúpidos y de manipulables. Pero... ¿Acaso importa?

No.

Curioso.
Nevermind